Si has llegado hasta es que probablemente ya sabes que la sal es un elemento fundamental en el funcionamiento de los equipos de cloración salina.
Todo se resume en una reacción de electrólisis a partir del agua de la piscina con una ligera concentración de sal, dependiendo de las características del clorador salino. Primaramente se genera sosa (NaOH), Hidrógeno (H2 ) y Cloro (Cl2). Éste último se disuelve en el agua formando ácido hipocloroso (HClO; desinfectante y oxidante).
Para terminar, se genera una última reacción de neutralización entre la sosa y el ácido clorhídrico, formando de nuevo sal, en un circuito cerrado y sin ninguna pérdida de producto.
Dicho esto, ¿Podemos utilizar cualquier tipo de sal para la piscina? Teóricamente, casi SÍ. ¿Es recomendable? Absolutamente NO.
Cuanto mayor pureza tenga la sal utilizada, mayor limpieza en el agua, mayor vida útil de las células electrolíticas del clorador y menor mantenimiento de la piscina.
Como podemos ver, el tipo de sal que decidamos utilizar no sólo repercutirá en la calidad del agua en el que nos estamos bañando sino que también afectará a los gastos asociados al funcionamiento de la piscina, y el tiempo dedicado a su mantenimiento.
¿Cuáles son los tipos de sal más utilizados en piscinas con cloradores salinos?
- Sal Marina. La alternativa más común, con un precio más reducido. Es la sal que habitualmente más se ha utilizdao, sobre todo en el primer uso.
- Sal Vacuum. Sal fina deshidratada con una mayor facilidad de disolución. La podemos encontrar en diferentes formatos (estándar, pastillas, píldoras…), lo que facilitará su aplicación en cada caso.
- Sal Epsom (sales de magnesio). Sales extraídas directamente de aguas con una muy elevada concentración de la misma. Su uso es más habitual en flotariums, zonas spa, etc…
- Pastillas Multifunción. No se trata únicamente de sal sino de la combinación de sal con diferentes productos que nos ayudan en el mantenimiento diario de la piscina. Son especialmente recomendables si el uso de la piscina es especialmente intensivo.
Y ahora, con toda esta información, ¿Qué sal eliges para tu piscina?